divendres, 16 d’octubre del 2009

Curso de Mariana Carbajal: Género y Comunicación

F.R.
para el Diarionline (Argentina)


El mensaje de los medios se hace con una mirada androcéntrica

CURSO. Mariana Carbajal dictará en Paraná un taller sobre periodismo de género.
El lenguaje generaliza y excluye, reduce, silencia. El uso de las palabras expresa una visión del mundo y marca las relaciones entre las personas. La periodista de Página 12 estará en nuestra ciudad el fin de semana para dar un curso sobre derechos humanos, género y sexualidad, en referencia a los medios de comunicación.

A pesar de que un grupo de personas esté integrado por mujeres y varones, decimos “ellos” y no “ellas”. Se habla en masculino aunque la mayoría sean mujeres. Es que por norma general, avalada por la Academia de la Lengua Española y, seguramente siglos y siglos de culturas y valores, se usa un sólo género, el masculino, para referirse a ambos. A esa norma la justifican con el principio de economía lingüística, es decir usar menos palabras para decir algo.Pero, con esas prácticas se ha logrado invisibilizar a una gran parte de la población. Por ejemplo, cuando se habla de las personas que habitan nuestro país decimos: “Los argentinos somos...”, a pesar de que la mayoría de la población son mujeres.

“La Real Academia Española plantea las generalizaciones en masculino y lo que ha hecho eso es invisibilizar la presencia de las mujeres”, advirtió la periodista Mariana Carbajal, quien estará este fin de semana en Paraná para dictar un taller sobre periodismo de género destinado no sólo a comunicadores sociales sino también a todo tipo de persona interesada en el tema.Según esta especialista, es posible hacer uso de un lenguaje no sexista sin “que sea una cuestión engorrosa” y a través de algunas estrategias “dar una visibilidad a las mujeres”.

IDEA. Con respecto al taller, Carbajal indicó que el objetivo es realizar una introducción a lo que se entiende como perspectiva de periodismo de género, a través de una mirada de los contenidos de los medios de comunicación y el uso que hacen del lenguaje.

“En general, los mensajes de los medios están hechos con una mirada androcéntrica, ya que en su gran mayoría los medios de comunicación están conducidos por varones”, hizo notar, aunque aclaró que en no pocos casos las mujeres apelan a la misma mirada.

“A veces, las periodistas entrevistamos a una mujer que ocupa un cargo público, por ejemplo, y le preguntamos cómo se las arregla con la casa y los hijos, algo que jamás le preguntaríamos a un varón”, subrayó.

En ese taller se analizará como se construye la noticia, sobre todo referidas a ciertas cuestiones como la violencia machista, el aborto o la salud reproductiva.

TEMAS. Con respecto al tema del aborto, la periodista de Página 12 aprovechará esta oportunidad para presentar su libro El aborto en debate. Aportes para una discusión pendiente.

—Con respecto al aborto, ¿es más pernicioso un mal tratamiento del tema o el silencio?

—Es importante que los medios de comunicación empecemos a tomar este tema. El libro que voy a presentar el viernes en Paraná tiene que ver con el recorrido que esa cuestión ha tenido en la historia. Mi objetivo fue visibilizar ese tema que está tan acallado en los medios, aunque en los últimos tiempos ha ingresado más que antes. Cuál es la óptica con la que se encara ese tema, es el otro punto. El problema del aborto es de salud pública, de derechos humanos. Los abortos inseguros son la principal causa de mortalidad materna en la Argentina, desde hace más de 20 años. Las mujeres que mueren son las mujeres pobres, las que no son escuchadas, son las que no tienen el dinero que tienen los sectores medios que también abortan pero recurren a una clínica, son abortos clandestinos pobres. Las que ponen en riesgo su vida y su cuerpo son las de sectores más vulnerables.

—¿Hay una manera de usar el lenguaje sin caer en posturas sexistas?

—Yo integro una red para un periodismo no sexista y en ese ámbito se elaboró un decálogo para el tratamiento de las noticias, sugerencias de cómo elaborar el tema. Por ejemplo, si nos fijamos en la indumentaria de una mujer también lo hagamos en la de los varones. Si criticamos a una mujer por sus gastos en ropa, igualmente lo hagamos con un varón. El punto es hacer un tratamiento igualitario.

—El problema no es sólo de los medios de comunicación...

—En el Congreso de la Nación se acaba de aprobar un reglamento acordado por las dos cámaras para que en los proyectos y en todos los documentos que se producen en ese ámbito estén escritos con un lenguaje no sexista. Hay diferentes estrategias para ello, aunque a veces resulte un poco engorroso pero no es tan difícil. Por ejemplo, si se habla de los trabajadores se puede decir “personas que trabajan”. Es volver a aprender la forma de hablar y de escribir.

—¿Primero tiene que cambiar la sociedad y después el lenguaje o es al revés?

—Los medios forman opinión y reafirman el sentido común, pero también pueden modificar la forma en que la sociedad interpreta al mundo. Tienen un rol importante en generar agenda de temas, puntos de vista, con lo cual son realmente importantes si queremos trabajar por una sociedad más democrática.

Mariana Carbajal dictará un taller de capacitación en derechos humanos, género y sexualidad el viernes 16, a las 16; y el sábado 17, a las 8, en el Centro Cultural La Hendija (Gualeguaychú 171).